Las entidades bancarias están tratando de sacarse de encima el enorme stock de viviendas vacías que tienen en sus balances. De hecho, no existe caja de ahorro o banco español que no tenga, en la actualidad, su propia división inmobiliaria, abriendo incluso a tal efecto grandes portales inmobiliarios.
No es novedad que ofrecen esas viviendas con grandes descuentos -algunos incluso hasta el 50%!- aplicables a su tasasión, y este es un primer punto a tener en cuenta acerca de su conveniencia: precios más baratos, aunque no siempre sea así, por lo que hay que tener buen ojo y no dejarse engañar. El mejor sistema para hacerse de ellas es mediante subastas inmobiliarias.
El segundo punto a tener en cuenta es la amplia financiación que tienen las entidades cuando se trata de sus propias viviendas. Cada banco o caja cuenta con un producto financiero exclusivo para ello, hipotecas cuyas condiciones son mucho más ventajosas que el resto, y con requisitos mínimos.
Recientes estudios publicados por Expansion.com dan cuenta de ello: la banca cobra un 30% más caras las hipotecas de las viviendas que no son suyas.
En general, la banca cobra un interés del 2,5% a sus pisos cuando al resto le exige un 5%, de media, según las estimaciones de la consultora R. R. de Acuña & Asociados. La razón parece lógica: las entidades tienen apuro por desprenderse de esos «muertos» que ahogan sus balances y los obligan a millonarias provisiones.
En fin. Como siempre, el que tiene un poco de dinero en las crisis puede hacer grandes negocios. Este es un ejemplo de ello.