Es necesario tener en cuenta que tipo de interés tiene la hipoteca, en que se diferencian, cuáles son las ventajas y a la vez conocer los inconvenientes. A continuación detallaremos los tipos de interés que se deben tener en cuenta:
Tipo de interés fijo: si se quiere seguridad se debe elegir una hipoteca con un tipo de interés fijo; así se sabrá lo que se va a pagar durante toda la vida del préstamo. El inconveniente que podría presentar este interés es porque es más alto que el variable, además los plazos suelen ser más cortos.
Tipo de interés variable: consiste en establecer un tipo por un tiempo determinado (6 o 12 meses), después de ese tiempo se establece un nuevo tipo sumando una cantidad (diferencial) a un índice oficial de referencia, en este momento es el más solicitado por los españoles debido a la tendencia a la baja de los tipos de interés en los últimos años.
Tipo de interés mixto: es fijo los primeros años (2, 3 o hasta 10 años) y el resto del tiempo es variable.
Con respecto a los índices de referencia mencionaremos los más importantes y explicaremos como se calculan:
EURIBOR: es el índice más generalizado, válido en la zona euro, se calcula a partir de la media simple de los tipos de interés aplicados en 64 entidades financieras europeas con gran nivel de negocio, es uno de los más empleados en la actualidad.
MIBOR: cuando el Euribor no estaba generalizado, cada país tenía el suyo, en España se llamaba Mibor.
IRPH (Índice de referencia de préstamos hipotecarios): es la media ponderada de los tipos de interés de los préstamos hipotecarios que hayan sido contratados o renovados en ese mes por el conjunto de bancos (IRPH Bancos) o cajas de ahorro (IRPH Cajas), IRPH CE (Conjunto de entidades) es un índice que engloba los dos anteriores y por eso recoge una media más alta.
CECA: es el índice fijado por la confederación española de cajas de ahorro.