El precio de la materia prima refugio por excelencia, el oro, nos ha dejado hoy con la ruptura de un nuevo máximo. El precio del oro superó en la jornada de hoy lunes, por primera vez los 1.600 dólares la onza.
Sin duda, esta nueva racha formada por diez jornadas de alzas consecutivas, se explica como consecuencia de que el oro siempre ha sido considerado un refugio seguro, por el que apuestan millones de inversores. Actualmente y con un panorama que muestra un recrudecimiento de la crisis de deuda soberana, el valor del metal precioso parece no tener límite.
La aversión al riesgo inunda los mercados, como consecuencia de que las crecientes dudas sobre las deudas soberanas europeas de Irlanda, Portugal, Grecia, Italia y España. Sin embargo, no sólo la zona euro resulta la culpable de esta nueva oleada de incrementos.
EE.UU. ha aportado en estos días su cuota de incertidumbre al mercado, dados los problemas que ha encontrado el Gobierno para elevar el techo de gasto, como consecuencia de la negativa de la oposición republicana. La probabilidad de que EE.UU. entre en suspensión de pagos ya no es una ilusión y el mundo está barajando la posibilidad de que se produzca una rebaja de la calificación de la deuda de Estados Unidos, lo que ha provocado una fuerte respuesta de los inversores que han huído en busca de valores refugio.
El alto endeudamiento de varios países europeos impulsa a la búsqueda de soluciones más drásticas, y por tanto, la cumbre de la Unión Europea (UE) prevista para el próximo jueves, puede ser decisiva.
El Consejo Mundial del Oro (World Gold Council) señaló que la demanda de lingotes de oro físico alcanzó las 280,4 toneladas, con un incremento del 62%, mientras que la demanda de monedas de oro oficiales subió un 39%. En conjunto, la compra de oro como inversión creció un 52% en el último año.
