Nuevamente retomamos el tema de las Participaciones Preferentes. Es que aún hay mucha gente que no conoce bien los pormenores de este instrumento financiero, que es vendido por las entidades como si fuera un depósito, pero definitivamente nada está más lejos de la realidad.
Numerosos especialistas están indignados -entre los que nos encontramos nosotros- a raíz de esta práctica de engaño muy poco ética que está llevando adelante las entidades financieras españolas.
Básicamente, el escándalo estriba en que estos productos tienen un riesgo mucho más alto del que cuentan los bancos, son perpetuos -no se puede rescatar el dinero salvo vendiendo en un mercado muy poco líquido y con muy pocos compradores- y su remuneración es muy inferior a la que exigen los inversores institucionales como contrapartida del riesgo que suponen.
Algunos puntos que debe saber sí o sí acerca de las Preferentes:
- Se trata de deuda subordinada, que significa que si la entidad quiebra, usted está en el último de la lista para cobrar lo producido por la liquidación, que, como siempre sucede, nunca alcanza para pagar todas las deudas.
- Si la entidad no tiene beneficios un año, puede dejar de pagar los intereses. Y tal como están las cosas, es de prever que numerosas entidades entrarán en pérdidas en este mismo ejercicio o a lo sumo en el próximo.
- Las participaciones preferentes no están cubiertas por el Fondo de Garantías de Depósitos en caso de quiebra de la entidad. Por ende, NO SON COMO UN DEPOSITO.
- Pagan unos intereses muy inferiores a los que deberían pagar para compensar el riesgo en que están incurriendo los clientes que las compran.
- Preferentes de las entidades que se han colocado o están colocando cotizan en el mercado a precios muy inferiores al que pagaron los clientes: en promedio se ubican entre un 30% y un 50% por debajo del precio actual de colocación.
En fin. Cuidado con lo que firma.