Llevamos muchos años hablando de la emigración como fenómeno global que se extiende de una punta a otra del planeta y lo hacemos prácticamente siempre desde la óptica de personas que buscan mejorar sus condiciones de vida trasladándose de unos países a otros. Sin embargo la globalización de la emigración no solo alcanza a los menos favorecidos y, cada vez en mayor medida los ricos también emigran aunque, eso sí, por motivos bien distintos.
No estamos ante un fenómeno nuevo, de hecho los últimos diez años ha traído consigo un crecimiento muy importante de dos fenómenos relacionados con las grandes fortunas: por un lado el abandono de países de origen como EEUU, Rusia y Francia entre otros, y, por otro lado la salida de un buen número de ricos de los llamados paraísos fiscales.
¿Emigran los ricos?
Tal vez sea una etiqueta poco adecuada, pero lo que ya es innegable es que destinos como Singapur o Londres se han convertido en los favoritos de multimillonarios de todo el mundo aunque también en esto ha clases.
El crecimiento de multimillonarios estadounidenses que han renunciado a su nacionalidad desde 2010 ha crecido casi multiplicándose por dos cada año, en este caso se da la paradoja de que a su vez EEUU se ha convertido en el destino favorito de los millonarios asiáticos, con una especial significación en los nuevos ricos Chinos. Prestando atención a esa fecha de 2010 encontramos que en ese año 2000 chinos solicitaron la semi-ciudadanía que concedía la E2: un visado para ricos que se extiende en duración y derechos para inversores en el país a partir de inversiones mínimas de 500.000 dólares.
Otro caso notable es el flujo de millonarios en dirección a Londres. Un flujo en el que la presencia de millonarios rusos se hace notar pero donde también acaban llegando fortunas asiáticas o de medio oriente. Un dato esclarecedor, las siete primeras fortunas del país son extranjeras.
Todo esto sin olvidar Singapur, un destino que se ha convertido en pocos años en uno de los favoritos de los ricos del mundo y que posee una política de tasas más que amable para las grandes fortunas.
Los motivos de estos movimientos
Los motivos no son los mismos en todos los casos, es evidente, pero podemos distinguir dos grandes grupos.
Por un lado aquellos millonarios que buscan políticas fiscales más blandas con respecto a impuestos sobre fortunas o beneficios y por otro lado aquellos multimillonarios que buscan poner su dinero a trabajar en entornos teóricamente más avanzados. La paradoja de EEUU mostraría claramente estos dos grupos.
Hay más claro está. El abandono de los antiguos paraísos fiscales por las grandes fortunas es otro hecho que se va produciendo con mayor frecuencia año a año. Un aumento de la rigidez en la vigilancia internacional unido a la imagen de capa caída de estos destinos muy asociada en algunos casos a cuestiones como el lavado de dinero, motiva la elección de nuevos lugares donde se combina una política amable en lo fiscal con cierto toque de glamour financiero, algo muy asociado a Singapur como ya hemos citado.
¿Y nuestros ricos?
Pues España ni lo uno ni lo otro. El movimiento de grandes fortunas españolas a otros países y el cambio de ciudadanía es insignificante en comparación a cualquiera de los ejemplos que hemos proporcionado, y, por otro lado la llegada de multimillonarios que requieran la ciudadanía española tampoco es un fenómeno digno de consideración como ocurre en Reino Unido.
Es más, entre las mayores fortunas de nuestro país el porcentaje de ricos extranjeros no es, ni de lejos, parecido a las cifras de Reino Unido.