A nada que el lector haya prestado atención en los últimos meses a la prensa especializada, habrá podido comprobar cómo la financiación de las pymes y los autónomos en nuestro país se ha convertido en uno de los ejes fundamentales del debate sobre el posible impulso al crecimiento económico.
Este hecho es comprensible si tenemos en cuenta del tanto la dificultad de acceso a financiación con la que este segmento se ha encontrado en los últimos años, como la realidad del retroceso de inscritos dentro del régimen de autónomos de la seguridad social, que sin duda también tiene que ver con la dificultad de lanzarse al mundo del autoempleo que actualmente existe en España.
En este caso traemos a revisión una propuesta de Bankoa Credit Agricole que, ya precisamos de entrada, se dirige a empresas con negocios con cinco años o más de actividad cuyo responsable físico jurídico se encuentra situado en cualquiera de los territorios del País Vasco, por tanto obviamente no se trata de un producto al acceso de todos los usuarios y en este caso si se aplica una limitación geográfica al mismo.
La entidad nos ofrece una línea de crédito con un máximo de financiación de 60.000 €, para un plazo de la línea de tres años, teniendo en cuenta que anualmente el límite de crédito se verá reducido en un tercio.
El funcionamiento a todos los efectos resulta ser el habitual a este tipo de productos, basado en la disposición de todo o parte del disponible y la vuelta a acceso a crédito en función de la amortización de lo dispuesto.
Con un tipo de interés compuesto de Euribor +2,5% anual, esta línea de crédito presenta una comisión apertura del 0,5% (de una sola vez) así como de una comisión de no disponibilidad del 0,25% trimestral.
Se trata de una propuesta para que el usuario deberá contar con el aval de Oinarri que presenta las condiciones siguientes; gasto de estudio a la solicitud del aval del 0,1% de la formalización del aval del 0,4%, comisión anual de aval del 1% sobre el límite en vigor, así como una participación social de 120,20 € por cada 3005 € avalados o fracción; teniendo cuenta que esta cantidad será devuelta a la empresa una vez cancelada la línea.