Crónica de una muerte anunciada. Este es el título de un libro de García Marquez, pero bien se le puede aplicar a la historia reciente del Santander Banif Inmobiliario.
Este fondo, que supo ser uno de los más exitosos del sector, y el más grande en su tipo, ha entrado en cesasión de pagos hace ya un año: ha aplicado un corralito financiero por un periodo de dos años, impidiendo el reembolso de las participaciones después de que sus inversores solicitaran reembolsos por importe de 2.617 millones de euros, el 80% de su patrimonio.
Para disponer del tiempo necesario para generar liquidez enajenando los activos del fondo -se trata de inmuebles, uno de los sectores más castigados por la crisis económica-, el Santander ha pedido a la CNMV suspender el reembolso de participaciones por un periodo de dos años a contar desde el 28 de febrero, hasta el mismo día de 2011.
Durante este plazo de dos años, la gestora aplicará una rebaja de sus comisiones, que pasarán a ser del 0,75%, mientras que el depositario también reducirá sus comisiones, al 0,10%. Parece mentira, no le dejan retirar su dinero y encima le cobran por ello…
Pero la historia no terminó allí. Para los maltrechos partícipes del Fondo Banif Inmobiliario, la tortura no tiene final. Recientemente, según una normativa que última el Ministerio de Economía, hemos conocido la noticia que la liquidación final del fondo podría demorarse todo lo que necesite la gestora.
Hasta ahora, el reglamento de liquidación de fondos de inversión inmobiliarios fijaba que el periodo para vender todos los activos del fondo no podía durar más de dos años, plazo tras el que los partícipes se convertían en propietarios de los inmuebles. Con la modificación legal que se presume se aprobará, se deja en manos de la gestora la decisión sobre los tiempos de venta de sus inmuebles y el plazo que tardarán en recuperar su capital los partícipes.
Avisado, el Banif Inmobiliario ha aplazado la venta de inmuebles ante la llegada de la nueva normativa, que le permitiría esperar todo lo que desee para devolver el dinero a sus partícipes.
Sin duda, una muestra más de los abusos de algunas entidades financieras para con sus clientes.
Es una pena que esto pudiera suponer el fin de las fondos inmobiliarios por las muchas consecuencias para inversores y economia en general que tuviera. Pero donde esta la confianza en el sistema si la CNMV lo aprueba mirando a otro lado. Esto es un pais de PIRATAS con BOTIN incluido y unos vigilantes que no se sabe en que están.
Perdona pero te equivocas, Botin es el jefe y sus lacayos o vigilantes hacen lo que se les ordena.
Esto es un CORRALITO como un piano, el anuncio de la que nos viene encima.
Y los borregos a votar sin chistar, que de eso se trata, 4 años de campaña mareando la perdiz y (mi)Epaña va bien. Ole!!