Para quienes desean cursar una Maestría en Administración de Negocios o más conocido por sus siglas MBA, se plantean diversos obstáculos, abandonar un trabajo seguro, irse a vivir a otro país, incluso dejar atrás familia y amigos. Sin embargo, hay una cuestión que preocupa a los candidatos a estos estudios: como contar con el dinero necesario para financiar dichos estudios.
La respuesta a esta cuestión puede tomar diversas formas, becas, ahorros propios del estudiante o hasta préstamos personales. Esta última opción es la que analizaremos a continuación.
La mayoría de las entidades bancarias cuentan con productos específicos dirigidos a los estudiantes que quieren financiar un MBA. Aunque muchas escuelas de negocios tienen ya acuerdos con estas entidades, es importante analizar lo que ofrece el mercado con el fin de obtener la mejor financiación.
Al analizar las distintas propuestas hay que tener en cuenta los siguientes puntos:
- Tipo de interés: corresponderá analizar si las entidades otorgan tipos de interés fijos o variables ligados a algún índice.
- Índices y diferenciales: Cuando el préstamo es variable, hay que fijarse muy bien en el índice de referencia escogido y en el diferencial que se le sume. Lo mejor es calcular cuánto resultaría de hacer la revisión en la actualidad.
- Comisión de apertura: Consiste siempre en un porcentaje del capital concedido. Las entidades más caras aplican el 2% , pero otras no cobran nada.
- Cancelación: También es importante saber si las entidades aplican comisión por cancelación anticipada. La mayoría de ellas las perdona en estos créditos, pero hay bancos que no lo hacen.
- Capital máximo: Corresponde analizar cuál es el capital máximo que puede obtenerse, ya que en ocasiones puede resultar insuficiente.
- Carencia: Muchas entidades ofrecen la posibilidad de incluir una carencia en el préstamo, de forma que la devolución de la deuda empieza más adelante, cuando el estudiante empieza a trabajar. Sin embargo en muy pocos casos se trata de una carencia total, es decir, de capital e intereses. En general la carencia sólo es de capital, por lo que desde el primer día hay que pagar los intereses.
A continuación le ofrecemos un resumen de algunas propuestas interesantes a su alcance: