Cacaolat, empresa pionera y líder del mercado lácteo, prepara su salida a la bolsa. O al menos es lo que dice su propietaria, Nueva Rumasa.
Inicialmente orquestada para la primavera de este año la OPV de Cacaolat podría posponerse y últimamente se habla cada vez más de una posible adquisición de la compañía antes de su proyectada salida a bolsa, que se estima antes de fin de año.
Según fuentes de Nueva Rumasa, se ha recibido el interés de seis compañías por la compra de Cacaolat, debido principalmente al gran valor de la marca octogenaria.
Con el fin de que Cacaolat inicie su cotización en bolsa, la empresa ha aprobado la escisión de los negocios de Cacaolat de Clesa, dotando a la primera de las actividades relacionadas con las marcas Cacaolat, Sali, Letona y La Levantina, así como los productos comercializados con estas marcas.
Analistas estiman que la valoración bursátil de la empresa rondaría los 180 millones de euros, y lo que busca la compañia con esta operación es solventar planes de crecimiento de Cacaolat, entre los que figura la construcción de una nueva planta en Barcelona, que se sumará a las otras cinco que posee: dos en Madrid y una en Galicia, Sevilla y Zaragoza, respectivamente.
