Comencemos por el principio: PIGS -cerdos en inglés- es una sigla que se forma con los nombres de los países más débiles -financieramente hablando- de Europa: Portugal, Irlanda, Grecia y España (Spain). Es un acrónimo muy doliente que usa sobre todo la prensa anglosajona.
PIGS resume la referencia a países con frágiles finanzas públicas pero distintos entre sí. Todos pertenecen a la eurozona, pero sus realidades son bien distintas, sobre todo la de España: a pesar de su gran crisis, sigue siendo una de las 10 economías más grandes del planeta.
Hace unos días, Portugal ha visto descender su nota de crédito de bonos de largo plazo a AA-, manteniendo el nivel del segundo escalon entre las mejores pero con perspectivas negativas. Irlanda tiene la misma AA-, Grecia ya vio bajar su nota a B y España se mantiene con la AA.
La debilidad de estas economías -Portugal tiene un desempleo del 10,1%, la mitad de España, y menos déficit y deuda que Grecia- está haciendo mella en la cotización del Euro, que está tocando mínimos de 10 meses frente al dolar estadounidense.
Para economistas de EEUU, como Paul Krugman, este es un problema estructural de la integración europea y sobre todo de la integración monetaria. Los economistas europeos, por el contrario, suelen hablar de problemas puntuales de cada uno de sus socios.
Lo cierto es que Europa no puede darse el lujo de dejar caer a uno de sus socios. Grecia será finalmente rescatada, a pesar de lo que se diga, ya que su caída dará una mala señal a los mercados, virando toda la presión sobre las demás economías perimetrales de la eurozona: Portugal, España e Irlanda.
Las débiles perspectivas de reactivación de los 16 miembros de la zona euro no ayudará a los más débiles. Por ejemplo, Portugal no ha sido afectado demasiado por la crisis financiera, pero la recesión en España golpeó a su vecino peninsular, a la que está muy vinculado.
La consecuencia directa de esta baja de calificación es el encarecimiento de la deuda soberana portuguesa, y no se descarta un contagio con las otras economías de la eurozona. ¿El Euro? Ha acentuado el ciclo bajista de su valor y ha tocado mínimos en 10 meses. Y al parecer, seguirá a la baja.