La deuda es un factor muy importante en la vida económica nacional, aún así, no siempre sabemos cómo funciona o cómo nos afecta.
Al hablar de deuda pública, solemos referirnos a un grupo de títulos de renta fija emitidos por el Estado o los organismos administrativos. Es un medio de financiar la actividad endeudándose posiblemente con otras personas u organizaciones o incluso con otros Estados.
Las formas más conocidas de deuda pública son las obligaciones, las letras del Tesoro y los bonos.
La clave para entender la deuda: cómo funciona
Ya hemos señalado que la deuda pública es un vehículo de financiación de las administraciones nacionales muy popular y extendido. A través de este se intenta conseguir el flujo necesario para los objetivos de actuación gubernamental.
La emisión de deuda se realiza sobre la base de ciertas condiciones, que se basan en lo que el emisor quiere conseguir y lo que necesita. Hay dos grupos principales a considerar en la deuda pública dependiendo de quién la compre. Por un lado, habrá deuda pública interna, emisiones adquiridas por inversionistas nacionales, y por otro lado, deuda pública externa, que tendrá como objetivo tanto a personas como a organizaciones o al Estado externo.
Clasificando la deuda según su cometido, se puede dividir en tres:
- Las emisiones en un periodo de tiempo relativamente corto se denominan letras del Tesoro con un vencimiento inferior a un año.
- Bonos, que se emiten a mediano plazo y son el tipo de bono más común para financiar las acciones del día a día principales del emisor.
- Finalmente, la deuda pública en un periodo largo de tiempo se emite en áreas donde se realizan grandes inversiones o en circunstancias excepcionales. Esta es una deuda que al ser de tan alta duración, puede cambiar con el tiempo.
¿Por qué tenemos y es necesaria la deuda pública?
El problema de la deuda está asociado a un déficit público. Muchas veces, el Estado gasta más de lo que se puede permitir. Por este exceso de gasto, lo que hace para cubrir ese exceso de gasto es aumentar la deuda que ha emitido.
La conexión directa entre deuda pública y PIB es un elemento esencial para entender la necesidad de deuda pública. Cuando se divide la deuda pública por el producto interior bruto, conseguimos lo que se conoce como capacidad administrativa para hacer frente a los pagos sin emitir deuda.
Cuando este ratio es bajo, entendemos que el sector público genera suficientes recursos para no tener que emitir más deuda. Sin embargo, a partir de ciertas tasas significa que la deuda del Estado necesita ser financiada. La deuda refleja los déficits acumulados hasta cierto período. Y la emisión de deuda pública atenderá la demanda derivada de esta acumulación. En resumen, la deuda es un instrumento financiero que ayuda a los países a cumplir sus objetivos financieros cuando es necesario, brindando a quienes la adquieren un rendimiento preestablecido en los términos de la deuda.