La moda de lo desechable es característica del siglo XXI. Todo lo que se usa, se tira.
Al principio había botellas de vidrio donde entregaban la leche, que con la modernidad fue cambiando a sachets de plásticos o los más nuevos envases de cartón. Luego fue el caso de las plumas estilográficas y el boligráfo descartable. Como estos casos, hay miles. En la actualidad es todo desechable, desde un boligrafo hasta un ¿teléfono móvil?
Sí, la Compañia Bic acaba de lanzar el primer teléfono móvil desechable, que viene con las funcionalidades más básicas, es decir, llamar y enviar SMS, radio FM, alarma y calculadora.
El móvil se podrá adquirir en puntos de venta tan accesibles como estancos, papelerías, gasolineras y grandes superficies comerciales a partir de la primera semana de julio a un precio de 29 euros con 12 euros en llamadas gratis incluidos.
Funciona con una tarjeta SIM de prepago recargable, al que se le pueden acoplar luego las diferentes tarifas de ahorro del operador. El Bic Phone es un concepto de «listo para usar» nacido de un acuerdo de licencia con Orange.
El concepto de desechable no quiere decir que una vez que se acabe la batería se funda como un encendedor. Dispone de una batería recargable que permite 240 horas de encendido y cuatro horas de conversación. Tiene más que ver con el hecho de que, si se pierde o se cae y se rompe, no hay problema y compra otro.
Ahora puedes prestar el móvil sin miedo…