Si nos detenemos en el momento actual del Euribor, a pesar del ajuste con el que cerraba noviembre (tal vez por encima de lo esperado) vemos que el cierre no lograba el descenso por debajo del 0.500% lo que de hecho no ha supuesto realmente una rebaja apreciable a las hipotecas de revisión anual que se revisen en función de dicho mes, algo que, a tenor del descenso del precio del dinero, fue fruto de muchas especulaciones.
Nos encontramos en definitiva ante un panorama si no contradictorio si al menos curioso, en el que el precio del dinero alcanza una cota baja histórica al situarse en el 0.25% e incluso con rumores de más ajustes a la baja no muy lejanos y teóricamente con síntomas de recuperación más o menos generalizados en buena parte de los paises más afectados por la crisis.
Y a partir de aquí ¿Cómo evolucionará el Euribor?
Lo cierto es que es una incógnita a medias. En principio existía una sensación bastante amplia de que el índice continuaría bajando, sin embargo, esta sensación en las últimas semanas se ha enfriado bastante: los motivos del enfriamiento tienen que ver con las noticias que aportaban mejoras en determinados datos macroeconómicos y también con los recientes datos del paro.
Sin embargo,sigue, aunque con menos fuerza, una sensación de que una nueva reducción de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo podría, efectivamente, modificar de nuevo la percepción de esta tendencia del Euribor ya que este podría bajar y situarse en cotas bajas, por ejemplo 0,30% o 0,40%.
Y si efectivamente el índice se colocará en esas posiciones ¿encontraríamos movimientos a la baja las hipotecas? No, por menos no lo parece. Debemos tener en cuenta que en pleno proceso de reducción del índice de referencia a lo largo de este año, las propias entidades financieras han compensando la reducción con el aumento de los diferenciales, si comparamos los diferenciales actuales con los de hace tan sólo un año vamos a ver una diferencia verdaderamente notable, una diferencia que ya se basa en el hecho de que la media de sus diferenciales se encuentra superando el 2%, y, incluso los diferenciales más baratos de las hipotecas online han aumentado su cuantía.