EL Cambio Franco Suizo Euro está en máximos en dos años. De hecho, el aumento del 24% del franco frente al euro en ese tiempo está provocando varios dolores de cabeza a las empresas suizas, cuyos productos se encarecen frente a los de Alemania, España o incluso el Reino Unido (aquí la libra esterlina ha tenido una devaluación similar que el euro frente a la divisa helénica).
Ni siquiera el Banco Central Suizo pudo con esta tendencia de apreciación del franco, y abandonó todo intento por frenar la suba en 2010, luego de una pérdida de 19.200 millones de francos. Sin embargo, el efecto de la apreciación está siendo muy negativo para las empresas de ese país.
Si bien multinacionales líderes como Nestle, el mayor productor mundial de alimentos, pueden mitigar las pérdidas trasladando parte de su producción a otras partes del planeta, las PYMEs se están quedando sin opciones de bajar costos, siempre a costa de reducir sus ya maltrechos márgenes de ganancias.
La culpa de la apreciación del franco suizo es que los inversores lo han considerado refugio ante situaciones como las crisis de deuda en la Eurozona, y por ello han estado saliendo de otras divisas como el euro y el dolar hacia la divisa suiza. En el año, el franco subió un 2,8% contra el euro y 9,8% contra el dolar.
Según Bloomberg, la experiencia muestra que un aumento de un 10% en el tipo de cambio por lo general trae aparejada una caída del 15% en las exportaciones. Sin embargo, al ser muchos de los productos suizos muy especializados, el efecto sobre el PIB suizo ha sido mínimo. Pero hay que tener cuidado con ello, ya que las exportaciones representan cerca del 50% del PIB de Suiza.
Pese al franco fuerte, la tasa de paro en Suiza llega al 3,1% (bastante menos que el 9,9% de la Eurozona), y el crecimiento en este año de Suiza alcanzará el 2,7%.
En fin. Tan mal no le va al pequeño país alpino.